martes, 23 de abril de 2013

Muero

Muero por esos ojos que como abismo se abren misteriosamente frente a mí, muero porque toqué tu mano y en ese instante imaginé la textura de toda tu piel.
Muero por ti, muero en ti.

Bendito el mundo que te puso frente a mí ese día, benditos tus padres por traerte al universo, bendita la tierra que te vio nacer, bendito el lugar, la hora y el por qué nuestros ojos se cruzaron.
Bendita tú, benditas las ganas de morir por ti, de morir amándote.
Benditos tus ojos que me hicieron vivir, vivir para morir, morir por ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario